Tour de fotografía - Lo más icónico

Desde este mirador, se puede observar en su totalidad la Ciudad de Antigua Guatemala y sus magníficas edificaciones. Además, se disfruta del apacible ambiente verde y natural, ideal para descansar, hacer ejercicio y observar valle adornado con la imponente belleza de los Volcanes de Agua, Fuego y Acatenango.

Esta parroquia fue una de las primeras fundada en la ciudad, Se distingue por su diseño barroco donde resaltan sus finos adornos tallados, que representan hojas, flores y ramas. Frente a esta iglesia se encuentra un parque y jardín infantil, el cual proporciona al visitante de un amplio espacio natural al aire libre, muy tranquilo para descansar.

Este es el ícono por excelencia de esta ciudad. A través del tiempo, la calle del arco se ha convertido en un punto de referencia ideal para reuniones y eventos, destacándose la celebración del año nuevo y el festival de las flores en noviembre. Miles de turistas de todo el mundo, visitan este ícono, atraídos por su arquitectura y colorido, así como por los comercios a su alrededor.

Debido su ubicación en el centro de la ciudad, se pueden encontrar una gran diversidad de negocios, restaurantes, cafés, librerías, bancos, panaderías y demás comercios.

La Plaza Mayor de esta ciudad, se constituye como el punto central de la ciudad de Antigua. Proporciona al visitante un amplio espacio al aire libre, muy agradable para ser recorrido y disfrutarse relajadamente, en compañía de amigos o de la familia. Es el punto de referencia, de donde puede partir para visitar cualquier sitio de interés.

La Catedral de San José, es muy visitada por los fieles devotos nacionales y extranjeros. Su fachada decora armónicamente la Plaza Central y constituye en la actualidad, uno de los sitios arquitectónicos más conocidos y emblemáticos de esta ciudad colonial.

El Convento de Santa Clara, es muy conocido por sus famosos arcos construidos en sus dos niveles y por su amplio jardín, adornado por una hermosa fuente de piedra tallada en su patio central. Las monjas Clarisas fueron quienes enseñaron a las mujeres locales a preparar viandas y dulces españoles, los cuales ahora constituyen una parte muy importante de la cultura antigüeña. El diseño de su edificación es ideal para llevar a cabo diversos eventos, recepciones, sesiones de fotos y celebraciones sociales.

Estas ruinas son icónicos testigos de lo devastadores que fueron los terremotos que azotaron a esta ciudad colonial. Estas edificaciones están prácticamente destruidas y se observan los restos de bóvedas, arcos y muros de más de un metro de ancho. En estas edificaciones fueron filmadas las escenas del terremoto que se muestran al inicio de la película “La Frontera”, protagonizada por Jack Nicholson, Harvey Keitel, Valerie Perrine y Warren Oates.